Una de las reconocidas diferencias entre la actuación teatral y la de cine es que esta última exige mucha reflexión, dado que el actor muchas veces debe formar parte de un relato y/o una estructura que desconoce en su totalidad.
En la mayoría de los casos no hay análisis de texto y en muchísimos casos ni siquiera hay ensayos. Y todo es registrado por una cámara en distintos tamaños de planos que significan una enorme cercanía e intimidad o lo contrario,una distancia que hace que lo que haga el actor, sea insignificante.
Los actores que trabajamos en teatro profesional con prestigiosos directores del ámbito nacional e internacional,conocemos los profundos y extendidos análisis en los que hemos participado y que nos permiten ir elaborando y participando del trabajo interior y el de puesta
Los profesionales de cine sabemos de la enorme exigencia en los aspectos técnicos,artísticos y humanos que su realización significa y que muchas veces trae como consecuencia que el actor de cine desconozca como elaborar su trabajo.
Nuestra propuesta educativa apunta a que los alumnos construyan su aprendizaje desde la práctica, con la cámara “encima” y puedan elaborar estrategias que les permitan elaborar creativa e inteligentemente sus personajes, que los capacite eficazmente para cuando tengan que actuar en cine y TV.
Se trata como dice Eduardo Pavlosky de entrar y salir de la "locura".
Entrar para crear y salir para reflexionar.
De eso se trata nuestro trabajo.